El hábito del triunfo.

El fin de semana los Rayados rompieron el hábito de perder. Volvieron a la senda del triunfo contundentemente cuando en muchas papeletas de quiniela, el mejor resultado que se les daba era el del empate.

Humberto Suazo demostró que es un jugador fuera de serie y que se inventa goles de la nada, como su segundo gol; en tiempo de compensación, solo frente a dos defensores y el Monterrey con 9 hombres. Con actuaciones así es fácil ganarse a la fanaticada y cambiar los abucheos por aplausos. Aldo de Nigris no se quedó atrás, ya que con su gol logró abrir el marcador y el juego a favor de los Rayados y a la vez rompió su sequía goleadora y le devuelve la confianza que pudo haber perdido en las últimas semanas.

Pero lo importante esa noche es que los Rayados se quitaron ese vicio de la derrota para enfilarse al hábito del triunfo. El fin del torneo se viene muy rápido sobre todo con la jornada doble que le sigue y si el Monterrey no llega con una racha importante a la liguilla, no llegarán lejos.

Muchos aficionados Rayados se han preocupado por la racha de 3 derrotas que tuvo el Monterrey, pero para su tranquilidad les puedo decir que en aquel Clausura 2003 tuvieron una racha de 7 partidos sin triunfo, para cerrar el torneo (de 19 fechas) con 5 juegos sin derrota. Incluso otra similitud con aquel torneo es que el único partido que se perdió en casa fue ante Jaguares, precisamente en medio de esa racha perdedora.

Pero para que este torneo tenga el mismo término que aquel del título, tienen que volver a 'apretar tuercas', aprovechar que juegan en casa 2 de los últimos 3 partidos y cerrar fuerte.

En fin, esperemos el triunfo sea un hábito permanente.

Y que se les 'olvide' perder.